YO SUFRÍ DEPRESIÓN POSTADOPCIÓN...

o algo muy parecido.

Según, Marga Muñiz Aguilar en su libro Cuando l@s niñ@s no vienen de París: orientación y recursos para la postadopción, los síntomas que nos pueden alertar sobre la depresión postadopción en "las mujeres suelen tener más sentimientos de tristeza, de vaciía, de falta de valoración personal y de culpabilidad. También pueden tener pérdida o ganancia significativa de peso, pérdida de energía o cansancio excesivo, insomnio o hipersomnia, dificultad para concentrarse y disminución de interés por la mayoría de las actividades". Pues a finales del año pasado yo pasé por un episodio parecido.

Cuando nos entregaron a Leire yo sabía que tenia por delante 7 meses de dedicación exclusiva para ella, entre baja maternal, lactacia, compactación de reducción de jornada y vacaciones estuve desde finales de febrero a principios de octubre para estar con ella. Esta época fué muy tranquila, teniamos una rutina muy marcada, podiamos descansar, hacia buen tiempo y saliamos a pasear y nos ibamos habituando la una a la otra y a nuestro cambio de vida. No negaré que tuvé algunos momentos de crisis cuando no tenia ni un segundo para mi pero lo fui superando. El problema empezo cuando me reincorporé al trabajo, Leire hizo un cambio radical en el sueño que yo acusé muchísimo, yo si no duerno no soy persona, y el cansancio se empezó a acumular. No paraba de perder peso, en poco tiempo perdí cinco kilos, que es mucho para mi que nunca he pasado de los 60, y me encontraba baja de ánimos y bastante floja. Un día me pareció que tenia que ir a urgencias y como solo les faltó reirse en mi cara decidí ir a mi médico de familia, le pedí unos análisis, y nada todo estaba perfecto así que me recetó unas vitaminas y un poco de tomárselo todo con más calma.

Poco a poco me he dado cuenta que no hace falta llegar a todo y a todos en todo momento, intento buscar huecos para mi, me tomo el trabajo más tranquilamente y si un día no me da tiempo ha hacer alguna cosa pues mañana será otro día. Lo que tengo claro es que si yo estoy tranquila y transmito tranquilidad mi niña estará tranquila, que si estoy tranquila estoy más contenta y descansada y puedo dedicarme al 100% a ella cuando estamos juntas y que todo momento se ha de disfrutar sin pensar las coses pendientes que aún tengo por hacer. Así que ahora que esta echando la siesta voy a aprovechar para tumbarme en el sofá y ver la serie que grave el martes. Buen fin de semana.